viernes, 13 de noviembre de 2009

A partir del texto escrito por Walter Gropius, en 1926, “Principios de la producción de la Bauhaus”, vamos a proceder a analizar una escuela que es considera por muchos la antecesora del diseño industrial tal y como hoy en día lo conocemos.

El autor del texto, Walter Gropius, fue un reconocido arquitecto quien defendió la racionalización de la industria de la construcción para permitir construir de forma más rápida y económica. En 1919, Gropius era el director de Sächsischen Kunstgewerbeschule (la Escuela de Arte y Oficios) y a su vez de la Sächsischen Hochschule für bildene Kunst (Escuela Superior de bellas artes), cuando decide fusionar ambas, combinando los objetivos académicos de cada una y añadiéndole una sección de arquitectura. De este modo nace la Escuela Bauhaus, que trata de eliminar las diferencias entre artistas y artesanos.


En la primera etapa de la Escuela, predomino la vertiente de la vanguardia alemana expresionista. Pero como nos dice el propio texto, hacia 1922 esta tendencia pierde fuerza a favor del neoplasticismo holandés defendido por Doesburg y apoyado por alumnos y profesores de la escuela Bauhaus. A partir de 1923 Gropius se ratifica en su postura y las tendencias del expresionismo son sustituidas por otras provenientes de la vanguardia de la época, como en neoplasticismo y el constructivismo Ruso.

Para comprender en que magnitud afectó este cambio de tendencias necesitamos saber los principios del neoplasticismo. Los defensores de esta corriente impusieron razón ordenadora en lugar de la intuición, la irracionalidad y el azar de los dadaístas. Buscaban una renovación total del arte a través del uso de formas simples y claras, caracterizado por el uso de colores primarios, comprensibles para todos. Sin duda el elemento que mejor define este movimiento es la revista “De Stijl”.

A su vez,el documento nos muestra las bases ideológicas de la escuela, entre las que destaca el contacto con la técnica sin olvidar la verdadera función del objeto, la esencia. El objetivo de la Bauhaus, es crear ”una cultura del pueblo y para el pueblo”, llevando al mayor número de personas posible sus creaciones. Esto está muy relacionado con la producción en serie que se acababa de iniciar con la revolución industria. Pero la producción en masa puede acarrear una menor calidad de los productos y contra esto luchaba la Bauhaus.

En nuestra opinión, la Bauhaus sentó la base del diseño industrial al tratar de unir todas las artes. Los talleres de la Bauhaus eran laboratorios donde diseñaban los objetos para ser producidos en cadena igual que hacen ahora nuestros diseñadores. En el texto se cita que “La realización de los objetos es más una cuestión de razón que de pasión”, del mismo modo los diseñadores no se levantan un buen día pensando que diseñaran una silla sino que se lo piden. Ambos lo hacen atreves de formas básicas huyendo de la ornamentación. Por último cabe destacar que ni el diseño industrial ni la propia Bauhaus implican un inconveniente para los artesanos porque su trabajo se complementa.

Para complementar el comentario hemos escogido una imagen que según nuestro criterio es la que recoge las definiciones de la Bauhaus. Esta imagen representa unas sillas propias de la escuela pero a su vez no son iguales ya que cambia ligeramente la forma y, aparentemente, el material también. En ella se representa el carácter industrial de producción en cadena, el objetivo de la escuela.



Fuentes de información:
http://historiadearquitecturamoderna.blogspot.com/2009/09/bauhaus_26.html
http://www.biografiasyvidas.com/biografia/d/doesburg.htm
http://www.imageandart.com/tutoriales/biografias/mondrian.htm
http://www.monografias.com/trabajos52/escuela-bauhaus/escuela-bauhaus.shtml
http://www.sitographics.com/conceptos/temas/estilos/bauhaus.html

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